NO SOMOS LOS ÚNICOS QUE LLEVAMOS ESTE ESTÚPIDO APELLIDO

 

NO SOMOS LOS ÚNICOS QUE LLEVAMOS ESTE ESTÚPIDO APELLIDO

 

Este libro me dejó un sabor raro en la boca. ¿Sabéis esa sensación de me ha gustado, pero lo he odiado al mismo tiempo? Pues algo así porque, aunque está catalogado como libro de humor, está plagado de ironía y de situaciones tristes que la autora narra desde un punto de vista cómico.

Es algo así como si te enseñara a reírte de las desgracias, lo cual puede ser hasta beneficioso a la larga. En mi investigación sobre la autora, he de decir que lo que pienso y lo que ella dice que quiere transmitir con sus obras coincide por lo que el mensaje llega bastante bien.

La verdad es que me gustan esos libros que hablan de la vida real, pero saltándose el punto de víctima e intentando llevarlo a otro nivel para que aprendamos de la situación desde otra perspectiva. Quizás esto se podría interpretar como una falta de emociones o empatía, pero pienso que es todo lo contrario. Más bien, me parece un modo muy inteligente de gestionar los obstáculos a los que a veces nos enfrenta la vida.

Si, esta obra me recuerda muchísimo a una de mis pelis favoritas “Una serie de catastróficas desdichas”, en la que aparecía Jim Carrey como el duque malvado y en la que se ensalzaba el hecho de que muchas veces a los niños no se les presta la suficiente atención simplemente por el hecho de ser niños. Sin duda libro y peli, invitan a reflexionar sobre el tema en general y la madurez que deberíamos ir adquiriendo con las vivencias.

Os dejo la sinopsis porque no quiero destriparos nada:

“Ella es una pija engreída; Él, un caradura molón, y son medio hermanos. Acaban de enterarse de que tienen otros tres medio hermanos, dos feúchos y una rubita adorable, que necesitan un hogar... La guerra está servida porque Ella se pirra por tener a esa encantadora criatura que inventa tórridas historias de amor a sus barbies, pero comete dos errores: pasar por alto que los tres están firmemente unidos e ignorarle a Él, el irresponsable”

 

Solo me queda decir que, sin duda, es una de esas historias que te cuesta olvidar y que, tras acabar el libro te invita sopesar sobre la educación que recibimos y la relación entre madurez y edad. ¿Lo habéis leído? Dejadme saber qué os pareció en los comentarios!!

Muchas gracias por leerme y no dudes compartir si te gustó!!